Cada elemento tiene un simbolismo particular que debe analizarse por separado. La Madera se toma como el primero debido a que es el símbolo de la Primavera, que es el comienzo del año. Así se relaciona con la creación, la nutrición y el crecimiento.

La Madera tiene forma vertical y alta. Es común encontrarla en estructuras religiosas, monumentales, militares o conmemorativas como obeliscos, columnas o torres de reloj.

Aunque los edificios modernos no necesariamente tienen forma de Madera, se pueden interpretar como símbolos de ella, en tanto ésta es un material de construcción. Estos edificios que se relacionan con la Madera por estar construidos con ella, deberían estar relacionados con la creación, la nutrición y el crecimiento. Así, los estudios de diseño o artísticos, los restaurantes o instituciones de nutrición resultan muy beneficiados con la influencia de la Madera. 

El Fuego se encuentra relacionado con el verano, el color rojo, con materiales plásticos, y con formas puntiagudas. Así, el Fuego representa el trabajo del hombre, la sangre, la vida animal. Además se considera un símbolo intelectual.

El Fuego es entonces apropiado para edificios como bibliotecas y lugares de aprendizaje, o también aquellos destinados a la Industria y a los procesos químicos. La ganadería y la carnicería son actividades que también se relacionan con el Fuego, así como la cocina. 

La Tierra por su parte se descubre en los edificios que son bajos y planos, poco adornados y con techos bajos y lisos. Simbólicamente se relaciona con el centro, con el color amarillo, con los ladrillos, el concreto y la arcilla, y con los cuadrados y planos.

Las construcciones de Tierra se consideran inamovibles por lo que sirven para actividades de almacenamiento. También pueden ser utilizados en la construcción o en el trabajo artesanal relacionado con la cerámica.

El Metal, por su parte, se relaciona con el Otoño, con el color blanco, con el Oeste, y con las formas redondeadas, así como con todos los metales. Las construcciones que tienen cúpulas, techos curvos, y arcos presentan las formas del Metal.

Así, los edificios como bancos o las casas de bolsa acostumbran tener cúpulas pues el dinero y las monedas representan el Metal. Por eso, para el Feng Shui aquellos que deseen tener éxito monetario, en el comercio y en los negocios deben ubicar su lugar de trabajo en un edificio con cúpula.

El metal es también un componente de los materiales de construcción, pero se recomienda para edificaciones comerciales más que para las domésticas o de vivienda. De igual forma, rige los cuchillos y las espadas así como los procesos de fabricación que incluyan metal como la joyería o la ferretería.

Por otro lado, el agua que está relacionada con el Invierno, con el Norte y con el color negro. También tiene que ver con el cristal y con las formas irregulares. Así las construcciones menos regulares son las que tienen forma de Agua.

El Agua es el elemento de las comunicaciones, por lo que cualquier tema de transmisión de ideas se beneficiarán de la influencia del elemento de Agua, como las artes.

En la construcción, el uso del cristal revela que la estructura pertenece al elemento Agua. Ahora, esto ocurre especialmente si el cristal se encuentra combinado con alguna forma o material de los elementos Metal y Madera, pues con estos la relación es generadora.

En el hogar, el agua tiene facultades limpiadoras, por lo que las aplicaciones más evidentes en su sentido material son el baño, el lavadero y la despensa.

Desde el punto de vista metafórico, cualquier zona que reciba la influencia beneficiosa del elemento Agua en el hogar, podría ser adecuadamente utilizada para el estudio.

En los negocios, el agua representa el correo y las comunicaciones, la publicidad, el trabajo textual, la informática y la ingeniería electrónica. El Agua también funciona para edificios que tengan que ver con fluidos y líquidos como las cervecerías y las destilerías, o las perfumerías. El negocio del petróleo es también parte del dominio del elemento del agua.